El vallecaucano Andrés Viafara, Fundador y director de la Suprema Corte Orquesta recibio un extraordinario reconocimiento en el salón Luis Carlos Galán del Congreso de la Republica, cuando luciendo la banda presidencial, le fue otorgada la medalla CINCO de la comunidad Internacional de Comunicaciones en la categoria de Gestor Cultural Musical.
“Este reconocimiento lo recibo, en nombre de todos los amantes de la música y especialmente de este género musical de la salsa que representa un patrimonio cultural en el País”, expresó Viafara
Andres Viafara ha publicado con la Suprema Corte Orquesta discos inolvidables como «Salsa Pesada», «Veredicto», «Envidiable» y «Más que Ayer».
La idea de crear la Suprema Corte Orquesta salió de su cabeza desde sus días con Grupo Niche. Era el trombonista de la orquesta de Jairo Varela cuando decidió crear su propio proyecto, pero el Jairo no lo dejó ir tan fácil. Le pidió que se quedara como arreglista, oportunidad que no pudo desaprovechar, pero no abandonó su proyecto. Los albumes clasicos de Niche como «Cielo de Tambores»(1990) se hizo paralelo a «Salsa Pesada» (1991) de la Suprema Corte.
Andres Viafara no nació en Buenaventura, pero se crió allá.
Su primera escuela fue su casa. Su papá tocaba el violín; su mamá, el piano y el acordeón, y desde muy niños Andrés Viáfara y su hermano tuvieron que aprender a tocar la guitarra para acompañarlos en las periódicas reuniones que hacían. Su profesor y posteriormente padrino fue nada más y nada menos que Enrique Urbano Tenorio, más conocido como “Peregoyo”, el del combo Vacaná.
Su encuentro con el trombón fue más una movida estratégica que una pasión dotada del cielo. Llegó a Bogotá porqué le tocó salir de su ciudad por problemas de seguridad. En la capital, empezó a tocar el bajo en algunas orquestas. Pronto notó que los instrumentos de vientos eran mejor pagos y había menos trombonistas, así que no lo pensó dos veces y se puso a estudiar el trombón.
Naceria asi una leyenda que hoy por hoy se ve reflejado en su Suprema Corte, una orquesta que conserva un sonido característico, armonioso, al mejor estilo de la salsa hecha en los 80. A pesar de ello, a Andrés Viáfara no le hace falta la salsa “de antes”, que tanto se ha exaltado. Él reconoce el trabajo que están haciendo las nuevas generaciones de salseros.