Por Carlos Passage
Una nueva investigación de la European Society of Lifestyle Medicine revela que las personas que salen de fiesta al menos una vez por semana muestran una salud cardiovascular más fuerte, niveles de cortisol más bajos y una mejor regulación del estado de ánimo.
Los participantes que bailan regularmente tienen una variabilidad de la frecuencia cardíaca un 21 % mejor y marcadores de estrés más bajos, ambos signos de una vida más larga y saludable.

Se descubrió que la combinación de actividad física, conexión social y música rítmica aumenta la serotonina y la dopamina, sustancias químicas que ayudan a combatir la ansiedad y el envejecimiento.
Bailar libremente es entonces uno de los hábitos más saludables que existen.
